Recordemos que la pasada semana Don Pedro Sánchez nos regalaba otro de sus largos discursos
Decíamos en Hispanidad que, mientras Sánchez sigue defendiendo que la okupación es un bulo, él no consigue echar de 'su' Sareb a los 3.600 okupas que tiene. Recordemos que la pasada semana Don Pedro Sánchez nos regalaba otro de sus largos discursos, en esta ocasión para explicarnos su plan de regeneración democrática: "Los bulos han hecho que el 34% de los ciudadanos teman que les ocupen su casa, cuando este problema afecta a menos del 0,06% de las viviendas del país", aseguraba su sanchidad.
Las declaraciones provocaron la indignación de la Plataforma de Afectados por la Ocupación, quienes hacían una curiosa comparativa con otros delitos que, por la regla de tres de Sánchez, tampoco deben importarnos nada a los españoles.
Cosas que se la pelan a @sanchezcastejon en datos 📊
— Plataforma Afectados Ocupación (@leyantiocupas) July 17, 2024
✅ Ocupación 0,06%
✅ Tráfico de drogas 0,043%
✅ Delitos contra la libertad sexual: 0,041%
✅ Agresión sexual con penetración 0,01%
✅ Homicidios dolosos y asesinatos consumados 0,0007%
✅ Secuestros 0,000025% pic.twitter.com/GYFXO4mdUm
Pero ahí estaba el equipo de información sincronizada para apoyar al amado líder. En este ocasión era La Sexta la que nos explicaba, con datos rigurosos y científicos, las palabras de Sánchez. El periodista económico José María Camarero nos daba las claves.
Exacto, exacto, exacto, las estadísticas que soltó Pedro Sánchez, y ahora los de la Sexta, solo recogen las denuncias por la vía penal. Pero la inmensa mayoría de las okupaciones las resolvemos por la vía civil porque la penal es una pérdida de tiempo. https://t.co/Py0D64nFpV
— Tristan el Subastero (@TristanSbstero) July 21, 2024
Ahora es Ricardo Bravo, presidente de la Plataforma, quien ha desmontado los datos de la maquinaria de Moncloa: hay que partir "de una Ley de Vivienda que no ha mejorado nuestro mercado -la gente tiene miedo a alquilar y se alquila menos a las familias por resultar más fácil declarar su vulnerabilidad-, de unas viviendas sociales que no se llegan a plasmar y, de una realidad que no registran los datos oficiales, porque hay una cantidad de ocupaciones que no se denuncian".
"Los procesos judiciales tardan mucho, y entonces, los propietarios deciden buscar acuerdos extrajudiciales; es decir, acuerdos con los okupas, o contratar una empresa de mediación", además aclara, "tampoco figura el número de inquiokupaciones", cuando un inquilino deja de pagar la renta y se niega a abandonar la vivienda, número que, "según nuestras estadísticas son tres veces más que el número de usurpaciones y allanamientos".