La persecución a los cristianos en África, especialmente por parte de los yihadistas, y particularmente en Nigeria, escribe cada día nuevos episodios. 

En ese país, al menos 52.250 personas han sido asesinadas en los últimos 14 años, por ser cristianas. 

Precisamente, también en Nigeria, la semana pasada, un seminarista llamado Na'aman Danlami fue quemado vivo por unos bandidos que atacaron y destruyeron la parroquia de San Rafael en Fadan Kamantan, en la diócesis de Kafanchan, en el Estado de Kaduna, en el norte del país, informó Fides

Los delincuentes atacaron la casa parroquial en la noche del jueves, 7 de septiembre, y le prendieron fuego. Aunque algunos sacerdotes consiguieron huir, Na'aman Danlami, de 25 años, que realizaba su servicio como seminarista en la iglesia, no pudo escapar de las llamas. 

Y en Kaduna, también el 7 de septiembre, otro seminarista fue secuestrado: se llamaba Ezequiel Nuhu.