El PSOE y Sumar han registrado este martes en el Congreso la solicitud de la constitución de una subcomisión de estudio para el reconocimiento y reparación de las víctimas de agresión o abuso sexual infantil en el ámbito de la Iglesia católica, en el seno de la Comisión de Justicia.
En concreto, el objetivo es llevar a cabo un informe "en un plazo máximo de 6 meses" sobre las medidas a tomar en todos los ámbitos para "garantizar el reconocimiento y reparación de las víctimas de agresión o abuso sexual infantil en el ámbito de la Iglesia católica, así como las acciones de prevención necesarias para evitar nuevos casos de agresiones y abusos".
Según explican socialistas y comunistas, no es que quieran continuar con la persecución a la Iglesia, no, sino "analizar y valorar las conclusiones realizadas por el Defensor del Pueblo" en su informe para, posteriormente, "acordar una serie de recomendaciones con el objeto de que se puedan acometer un conjunto de medidas y acciones que refuercen la prevención, incrementen la protección y se establezcan los mecanismos necesarios para la reparación de las víctimas".
Sí, se refieren a ese contrastadísimo informe en el que se inluía, por ejemplo, el 'caso bollycao', el cual Gabilondo y El País dieron por verdadero cuando fue inventado por cuatro amigos. Tras quedar demostrada la falta de profesionalidad del diario y la falta de rigor e investigación del Informe del Defensor del Pueblo, PSOE y Sumar siguen intentando dar credibilidad a Gabilondo.
La persecución contra los católicos sigue su curso. Sánchez va a por los curas... a costa del gigantesco fraude sobre pederastia clerical del excura Ángel Gabilondo. Y hablemos claro: al Defensor del Pueblo y a Sánchez les importa un bledo la pederastia. De hecho, ignoran la pederastia laical y les encanta pervertir a los niños en las escuelas. Y es que de lo que se trata es de masacrar a la Iglesia de Cristo, y en base a una gran mentira, no podemos olvidar que la pederastia clerical sólo representa el 3% del total.
Pero para hablarles de esto, mejor escuchar las palabras de Josep Miró i Ardèvol que, con el apoyo de la Fundación NEOS, presentó esta semana el libro La pederastia en la Iglesia y la sociedad. El gran chivo expiatorio. Según manifestaron, los políticos españoles sólo hablan de abusos a menores para atacar a la Iglesia.
Josep Miró i Ardèvol estuvo acompañado de Jaime Mayor Oreja, presidente de la Fundación NEOS, del editor, Humberto Pérez-Tomé y del profesor de Comunicación de la Universidad Francisco de Vitoria, Isidro Catela.
"En España abundan, cada vez más, los abusos sexuales contra menores, según indican distintas fuentes (Fundación ANAR, informes de Fiscalía, el Ministerio de Interior), pero a los políticos no les interesa este tema, no lo estudian y no lo combaten. Sólo les interesan unos abusos: los que tienen alguna relación con la Iglesia Católica, que son menos del 0,5% del total de los abusos a menores", denuncia en su libro Miró i Ardèvol, ex-político y uno de los impulsores de Corriente Social Cristiana y la Asamblea por la Vida.
Abusos sexuales y a menores hay en muchos ámbitos, son graves, y deben ser combatidos, aseguraron, pero el libro especifica que en España lo grave es el desinterés de la clase política, que no busca ni estudiar, ni detectar ni combatir los abusos, sino que solo los utilizan para atacar a la Iglesia. Tanto Mayor Oreja como Miró i Aedèvol animaron a los católicos a trabajar unidos. "Si hay fundamentos compartidos y comunes, se puede trabajar en la misma dirección. Es un error pensar que todos los católicos han de tener exactamente las mismas posiciones políticas, pero también es error pensar que no pueden hacer nada conjuntamente. Si hay autenticidad en esos valores compartidos, habrá líneas de acción en común".
Sobre el relato político y de la prensa de izquierdas respecto a los abusos a menores, Mayor Oreja considera que detrás hay envidia e hipocresía. «En España hemos visto este ataque que llegaba desde personas cercanas al Gobierno, como el Defensor del Pueblo, y de la prensa de izquierda. Hay casos de abusos, sí, pero lo terrible es la doble vara de medir. Si es con los compañeros de tu partido, ¡esa vara de medir se reduce y casi desaparece!".
El libro señala fenómenos graves en la sociedad española: los delitos contra la libertad sexual, según el Ministerio de Interior, son el doble que hace 7 años, unos 23.000 al año, y 4 de cada 10 son contra menores. "Las chicas de 14 a 17 años son las víctimas más frecuentes, pero nunca salen en los debates cuando se habla de violencia contra la mujer", detalló.
El Informe del Defensor del Pueblo sobre abusos en entornos católicos (y sólo en entornos católicos) es como mirar un magma enorme por el ojo de una cerradura", negándose a investigar el 99,5% del problema, el que se da fuera de la Iglesia, denunció Miró. "Un año antes ERC presentó una iniciativa parecida, que pedía investigar los abusos en el entorno educativo, pero en todas las escuelas, no solo en las católicas: fue derrotada en votación".
"Los datos de Fundación Anar muestran que por cada caso vinculado a la Iglesia hay 28 cometidos por maestros y profesores. Pero esto no interesa". "Asignar delitos a una comunidad concreta, en este caso la católica, es discriminatorio y anticonstitucional. Desde One of Us y E-Cristians presentamos un recurso de inconstitucionalidad, pero hoy la Constitución se mide sólo según el criterio del que manda", denunció el ex-político catalán.
Sólo los políticos españoles se han centrado única y exclusivamente en entornos católicos, y lo han hecho para tomar a la Iglesia Católica como chivo expiatorio, desatendiendo más del 99% de los casos.