Recordemos que esta semana los españoles hemos sido honrados con un nuevo discurso de Don Pedro Sánchez, en esta ocasión era para explicarnos su plan de regeneración democrática: "Los bulos han hecho que el 34% de los ciudadanos teman que les ocupen su casa, cuando este problema afecta a menos del 0,06% de las viviendas del país", aseguraba su sanchidad.

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Ya de entrada las declaraciones son curiosas, puesto que el Gobierno antes, no solo defendía que la okupación fuera un bulo de la ultraderecha, sino que sostenían que era algo que no preocupaba a los españoles. Como ya estamos acostumbrados con Sánchez, las versiones son cambiantes, ahora reconoce que a los ciudadanos nos preocupa la okupación pero sólo porque es algo que ha conseguido la ultraderecha meternos en la cabeza, porque en realidad es un absoluto bulo. 

Para continuar tenemos que mencionar a la Sareb, como recordarán, hubo miles de viviendas que, tras el estallido de la burbuja inmobiliaria, quedaron en un limbo, y pasaron de estar en manos de bancos quebrados y empresas a ser propiedad de la Sareb. En cuanto a la composición del capital de la Sareb, el 50,14% pertenece al Estado, a través del FROB, también creado por la crisis financiera, y el resto está en manos privadas. Uno de los grandes problemas de España es que nos creímos más listos que Estados Unidos y, al hacernos con esas viviendas, quisimos 'vender bien', no queríamos que esas nuevas propiedades se malvendieran por lo que aguantamos el stock pensando que la situación mejoraría.

Algo que no ha ocurrido y catorce años después ni hemos vendido, ni la situación ha mejorado y nadie quiere las propiedades de la Sareb. Para rematar la jugada, en ambos organismos se ha creado toda una organización con muchos puestos de trabajo a la que ninguno de sus trabajadores quiere decir adiós. 

La Sareb tiene muchas viviendas y tampoco se libra de los okupas, diga lo que diga el Sánchez, y no lo decimos nosotros, sino el propio presidente de Sareb, Javier Torres. En un artículo en la revista del IEE aseguró que la sociedad tiene 3.600 viviendas en las que residen familias que en muchos casos no son vulnerables pero que se niegan a colaborar, por lo que se han iniciado los procedimientos necesarios para recuperar la posesión.

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Uno de los casos identificados lo hemos contado en Hispanidad. Y es que ya no es sólo que la Sareb tenga okupas, algo que Sánchez niega, sino que encima no consiguen desalojarlos, es lo que sucede en Vallecas, donde ya se ha intentado dos veces. Tras la suspensión del primer desahucio, el lanzamiento se fechó el 10 de julio, pero la Sareb volvió a optar por posponerlo, dejando nuevamente a los vecinos tirados y a merced de las amenazas de los okupas. 

¿Recuerdan a los okupas rentistas de Vallecas? Hablamos de una urbanización con 126 viviendas. Antes de estar todas vendidas, la constructora quebró y 28 pisos quedaron vacíos y bajo la propiedad de la Sareb. Los vecinos pensaban que una empresa estaba alquilando los inmuebles de manera legal, pero la realidad era muy distinta. 

"Nos damos cuenta que buena parte de nuestros vecinos son okupas porque aquí llega un señor con un cerrajero intentando entrar en una casa que no es suya y llevarse un Porsche de alguien que está aparcado en una plaza de garaje", explicaba Mari Ángeles, una de las vecinas. Esta persona vive en la urbanización, evidentemente como okupa, y se dedica a alquilar el resto de pisos de manera ilegal.

Los vecinos denunciaron por múltiples conflictos, violencia, insultos y amenazas. Como decimos, el primer desahucio no se llevó a cabo y el segundo, previsto para esta semana, tampoco, más okupas acudieron para evitarlo, y lo consiguieron.

"Cuando hemos bajado ya habían entrado bastantes en varias casas, se han juntado en una de ellas para hacerse más fuertes o se iban trasladando de un portal a otro", contaba una de las vecinas. "Ahora te miran, te sonríen y luego por detrás te las arman. Vinieron hace poco a las doce de la noche haciendo una mudanza y al día siguiente mi vecina ya tenía la cerradura con pegamento. Nos están haciendo la vida imposible".

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Ante la desesperación, los propietarios han decidido manifestarse en las sedes del FROB y la Sareb. En el vídeo pueden ver el bulo del fascismo y la ultraderecha.