El policía Alfredo Perdiguero denunciaba recientemente que el caso de una mujer de 60 años, violada por un inmigrante ilegal, no fue difundido en medios, ni condenado por el Ministerio de Igualdad.

En Hispanidad, añadíamos a la noticia la respuesta de la que fuera Pta. interina de RTVE, Concepción Cascajosa: "Tal y como dictan los códigos deontológicos y los libros de estilo de la profesión periodística, la nacionalidad de cualquier persona sólo se concretará cuando ésta sea relevante para la comprensión de la información".

Ahora, la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife dicta una sentencia de 31 años para el violador tras considerar probados los delitos de agresión sexual, lesiones, robo con violencia, amenazas y detención ilegal.

Los hechos tuvieron lugar a principios de enero de 2023 en el Edificio Olympo, cuando una mujer de 60 años se disponía a ingresar a su lugar de trabajo. Según la investigación, el agresor la siguió desde la Plaza de La Candelaria hasta el inmueble, asegurándose de no hacer ruido al caminar descalzo. En el momento en que la víctima accedía a la oficina, el atacante la abordó, la empujó al interior y cerró la verja tras de sí, impidiendo que alguien pudiera intervenir.

El asalto se prolongó por más de 50 minutos, según las grabaciones de una cámara de seguridad ubicada dentro del establecimiento. La mujer fue víctima de una brutal paliza, recibiendo golpes que le desfiguraron el rostro. Además, el agresor la violó «de todas las formas posibles» antes de sustraerle dinero y sus zapatos para poder huir sin caminar descalzo.

El agresor había llegado a España días antes en una patera que desembarcó en Lanzarote. Tras su llegada, fue trasladado al centro de acogida temporal de extranjeros de Las Raíces, en La Laguna.